Un whatsapp criticando a alguien, una pintada en una pared, un empujón al ‘tonto’ de la clase en unas escaleras, una burla a las espaldas, un comentario machista, cotilleos, medias mentiras... Todos actos inocentes que realizamos todos los días de forma más o menos inconsciente, sin maldad. Pero que acaban teniendo consecuencias. A veces terribles…

La reflexión se atribuye a Carlos Álvarez Ossorio, director de la obra Otelo En La Red, con la que el próximo martes 7 de mayo, a las 12:00 horas en el Teatro Municipal Juan Bernabé, William Shakespeare se paseará por Lebrija. Y no lo hará solo, sino con alguno de sus personajes, como Otelo, Desdémona, Yago, Casio o Emilia, pero en un contexto muy distinto al que fueron creados por el maestro británico.

En esta ocasión se trasladan a un instituto, polvorín común de emociones, encontronazos y descubrimientos adolescentes. Es hasta ahí donde Álvarez Ossorio, con la dramaturgia de Jesús Torres junto a actores y actrices como Carol Delgado, Elena de Frutos, Diego Olivares o José Luis Verguizas, ha querido llevar esta obra, con adaptaciones, que se enmarca dentro del Teatro de Valores, abordando por tanto temas de actualidad entre los jóvenes como son el acoso, el bullying, el uso de las redes sociales o la violencia de género.

El pasado 2 de mayo se celebró el Día Internacional Contra El Acoso Escolar, suponiendo esta reivindicación un reto de presente para las instituciones y siendo esta obra una apuesta conjunta de la Delegación de Educación y la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Lebrija para concienciar sobre dicha problemática.

La compañía del espectáculo, El Aedo Teatro, apostilla que el Otelo de la Venecia del siglo XVII creado por Shakespeare bien podría ser un joven de diecisiete años de cualquier instituto, “donde las relaciones de amistad, amor, poder, celos y secretos corren de pupitre en pupitre”.

Manipulación, inseguridad, ciberacoso...

En esta obra, creada para jóvenes y adolescentes a través de un lenguaje cercano junto a nuevas tecnologías, uso de teléfonos móviles y una serie de elementos que forman parte de su rutina, se tratará de “descubrir cómo esos primeros impulsos comunes a todos pueden desembocar en consecuencias terribles e imprevisibles, como el bullying, el cyberacoso o la violencia de género”, como indica el director, Álvarez Ossorio.

Él mismo es quien explica que Otelo En La Red versa sobre “la manipulación y la inseguridad , que encajan como un guante en un contexto adolescente. ¿Quién hay más manipulable e inseguro que un joven? Es fácil para un adolescente entender las motivaciones de un Yago ninguneado, incluso sus primeros intentos impulsivos de vengarse, como también lo es entender las inseguridades de Otelo”.

Una problemática común

La celebración de esta obra está destinada a los centros educativos e institutos de Lebrija con motivo del pasado Día Internacional Contra El Acoso Escolar. Tras la función, los y las asistentes participarán en un coloquio con los protagonistas del espectáculo para tratar de reflexionar sobre las temáticas abordadas, buscando discernir de manera conjunta y crear conciencia.

Sobre esa concienciación, el pasado 2 de mayo, la Delegada de Educación, María Teresa Ganfornina, quiso hacer hincapié en las labores e iniciativas en las que se viene trabajando desde el Ayuntamiento de la localidad junto a los diferentes agentes sociales con el firme objetivo de eliminar el acoso de las aulas. La importancia de ello reside en la necesidad de crear los protocolos necesarios para actuar de forma conjunta, ya que “el acoso puede darse en cualquier momento y en cualquier nivel educativo”.

La Delegada hizo también referencia a la importancia que “tenemos todos” en este asunto, “pues no se trata de un juego de niños, lo que nos lleva a tener que hacerlo más visible este problema y trabajar en ello”, aconsejando a todos aquel alumno o alumna que no se vea con la fuerza o la confianza suficiente a denunciar una situación de acoso a realizarlo de forma anónima a través del Buzón del Consejo de Infancia y Adolescencia.

Pero no solo el acoso sufrido en primera persona, sino el recibido por cualquier otro compañero: “No deben mirar para otro lado ante el sufrimiento. Apostamos por la cultura de la educación, la paz y la no violencia, por lo que queremos que los alumnos no sean pasivos y respalden a las víctimas, poniendo así punto final a la posición de poder en la que se siente un agresor/a o acosador/a”.

El Aedo, teatro como punto de partida

La compañía andaluza El Aedo Teatro no solo trata con este espectáculo realizar una labor pedagógica, sino también sembrar semillas en diversos sentidos. Y uno de ellos es el de hacer del teatro un punto de partida, ya que defienden que su “compromiso como creadores es el de ofrecer al joven una visión del mundo diferente, propia, personal y alternativa a aquella que reciben a través de lo que ven, oyen o estudian”.

A través de la comunión con el alumnado-espectador, desde El Aedo apuestan por satisfacer sus necesidades a través del teatro, pero buscando a la vez “aparecer en el escenario, lanzar al joven preguntas sin respuestas concretas”. Todo ello hacen de la mezcla un sello de identidad propio, que promete dejar huella el próximo martes. Y si es a modo de siembra, aún mejor, pues pronto recogeremos sus frutos.