Ayer, 5 de octubre, se celebró una reunión ordinaria de la comisión organizadora de la Caracolá Lebrijana y entre los puntos del orden del día se aprobó por unanimidad conceder a Inés Peña Peña, Inés Bacán, el caracol de oro de la 59 Caracolá Lebrijana.

El alcalde de Lebrija, Pepe Barroso, ha sido la persona encargada de comunicar tan grata noticia a la cantaora, quien se ha mostrado muy agradecida por tan importante reconocimiento.

Inés Bacán pertenece a una de esas familias que han escrito con letras doradas muchas de las más importantes páginas de la historia del Flamenco, Los Pinini.  Y es, precisamente, en el seno familiar, en las fiestas y reuniones, donde la cantaora deja ver su valía durante años.  No es hasta 1990 cuando da el primer paso profesional al participar en la grabación ‘Noches gitanas en Lebrija’, producido y dirigido por su hermano Pedro Bacán. Y precisamente de la mano de su hermano recorrerá multitud de escenarios en distintos continentes.

En 1995 graba su primer disco “‘De viva voz”; y participa en el directo de su hermano “Marisma. Del Pentagrama a la fuente”, grabado en la Bienal de Flamenco de Sevilla de 1996. Al año siguiente debutó en la XXXIII Caracolá Lebrijana de la mano de su primo Juan Peña El Lebrijano. Tras la muerte de su mentor, inicia su carrera en solitario participando en festivales y peñas, colaborando en discos y espectáculos. En 1998 graba su segundo disco, ‘Soledad sonora’ (Auvidis, 1998), acompañada a la guitarra por Moraíto Chico. Antes de grabar su siguiente disco, hizo colaboraciones con Dorantes en “Orobroy” (1998), o “Los Peña. Cantos vividos” en 1999. Años más tarde publica ‘Pasión’ (2003), dentro de la colección del sello Palo Nuevo. Entre tanto, ofrece notables recitales como el del Festival de Mont de Marsan, en 1999 y en 2003.

Inés ha participado en numerosos espectáculos y homenajes, pero a partir del año 2000 vendrán innumerables actuaciones en festivales, peñas e incluso Bienales de Sevilla. Por citar alguno de ellos “Flamenco a dos” (2002), en el que tuvo un mano a mano con Curro Malena, “Tábula rosa” (2006), de Israel Galván, “Primos y hermanos” (2010), de Pedro Peña y bajo la dirección de Tere Peña, con los que también realizó varios espectáculos en la siguiente década, una etapa prolífica en la que homenajeó al Lebrijano. 

Su último disco “Serrana” lo saca al mercado en 2017, aunque Inés sigue trabajando en su línea, compartiendo escenarios con los suyos, como haría en 2018 en “Luna nueva”, dirigido por su sobrino Sebastián Bacán Chico, hijo de su hermano Pedro. Aquí compartió escena con su prima Concha la del Lagaña y su hermano Juan Bacán, o con Miguel Funi hijo.

Inés mantiene viva la esencia de los cantes de Lebrija y como fiel reflejo de ello presentó en 2020 en la XXI Bienal de Sevilla el espectáculo “Memoria de una superviviente”, honrando a su abuela Fernanda Funi y evocando sus recuerdos, y donde hizo aportaciones su hijo José Bacán. Sus conocimientos del cante y la solera que preserva la han llevado a obtener galardones y reconocimientos, como la XXVII Palma de Plata Ciudad de Algeciras (2019) o el homenaje del XXXIII Circuito Flamenco de Peñas de Sevilla (2020).